Tanto si se trata de usted, señora, como de usted, caballero, las camisas suelen necesitar algunos pequeños retoques para que le queden perfectas.
Al igual que una chaqueta, la camisa aporta mucha elegancia a un conjunto</bold>.
Aquí le presentamos los diferentes tipos de arreglos a los que puede enfrentarse después de comprar una camisa</bold>.
Demasiado largas o, por el contrario, demasiado cortas, debes saber que es totalmente posible retocar la longitud de las mangas de una camisa</bold>. Y para ello, generalmente pasamos por el hombro (y más raramente, por la muñeca).
Si tu manga tiene demasiado espacio</bold>, el sastre retomará la costura por el interior del brazo</bold>. Tenga en cuenta, sin embargo, que cuando se quita demasiada tela pueden aparecer pliegues.
Por último, ten en cuenta que un hombro también puede reposicionarse</bold>. Este es el caso, en particular, de los hombros caídos (y, por tanto, demasiado grandes) que hay que enderezar con regularidad.
Para ajustar correctamente una camisa a su talla, el sastre podrá utilizar tres costuras: delantera, trasera o lateral. En general, se prefieren las costuras laterales, ya que son menos visibles.
Sin embargo, para ajustes más grandes, se puede trabajar en las otras costuras (delantera - trasera), para evitar pliegues.
También es habitual utilizar la técnica de la pinza para ajustar la talla de una camisa</bold>, principalmente en la espalda.
Aquí hay una petición más rara pero, no obstante, perfectamente factible.
En este caso, el sastre tendrá que hacer una costura en la parte central del cuello.
Piénsatelo bien antes de hacer este tipo de arreglos, suelen ser más caros.
Más fácil de acortar que de alargar, el largo de una camisa también se puede modificar.
A continuación, pasaremos a la parte inferior de la camisa, empezando por descoser el dobladillo y reajustar la altura en función de tu estatura.
Para alargar el largo, no tendrás más remedio que utilizar la anchura del dobladillo para ganar unos milímetros o incluso centímetros.
Otra opción es coser un trozo de tela a lo largo de todo el bajo de la camisa</bold>, lo que te permitirá añadir tantos centímetros como quieras. Dependiendo de la tela que elijas, esto podría cambiar el estilo de tu camisa.