Llevado a la espalda, al hombro, en la mano o colgado del hombro, el bolso es omnipresente y ocupa un lugar importante en nuestro guardarropa. A muchas nos gusta cambiarlos, según la estación, nuestro estilo o simplemente nuestras actividades.
Saca toda tu ropa vieja o la que ya no te pones e imagina tu flamante bolso 100% upcycled.
Empecemos por lo más sencillo, una bonita bolsa de algodón. No requiere demasiados conocimientos técnicos y puede que consigas hacerla tú misma con unas pocas tijeras.
Desentierra las sábanas viejas de antaño, los manteles que heredaste de tu abuela, las cortinas de lino apolilladas (consulta nuestro estupendo artículo sobre cómo reparar los agujeros de polilla en la ropa sobre este tema) y todas las telas gruesas que abarrotan tus armarios y que hace años que no sacas.
Si sólo tienes telas lisas, puedes pensar en un bonito bordado con un nombre, un mensaje o una ilustración poética.
¿Sabías que al personalizar nuestros objetos les damos un valor único que nos hace más proclives a conservarlos durante más tiempo?
Así que usemos nuestra imaginación y creemos belleza a partir de lo que ya tenemos.
En las últimas temporadas, la mochila ha vuelto a convertirse en un must-have, y las marcas se complacen en adaptarla en todas sus formas.
Hoy, sé tu propio estilista y crea una mochila que realmente se parezca a ti</bold>.
Con nuestros Tillistes, pensamos en la mochila vaquera, porque todos tenemos viejos vaqueros en el armario que bien podrían reciclarse.
Tú eliges la forma: rectángulo, cuadrado, redondo, ovalado o incluso triangular. Añade bolsillos aquí y allá, borlas o cremalleras brillantes. Es tu bolso y puedes personalizarlo a tu imagen y semejanza.
¿Quizá se trajo magníficos jacquards, brocados u otras telas bordadas de su último viaje a la India?
Este es el momento perfecto para utilizarlos para confeccionar un bolso de inspiración bohemia.Podría estar hecho enteramente de tela o con bonitas asas de cuero, para darle un carácter cualitativo más evidente. Tú eliges.
Prefiere las asas pequeñas para un bolso de día y las grandes para un bolso deportivo o de viaje.