Hoy vamos a descubrir cómo dar a tus cortinas un acabado atractivo utilizando pestañas.
Simples, dobles, con borlas u otras, las lengüetas aportan cierto refinamiento y sencillez a sus cortinas. También darán a sus cortinas una caída recta impecable y una ondulación uniforme.
Antes de empezar, asegúrate de que lavas y planchas bien tus tejidos</bold>. Tras el lavado, algunos tejidos, como el algodón o el lino, encogen considerablemente.
Considera la posibilidad de confeccionar cortinas anchas y onduladas con dobladillos relativamente largos, esto te permitirá adaptar las mismas cortinas en diferentes ventanas, en caso de que cambies de casa.
Puedes elegir los mismos tejidos para las cortinas y las piernas o, por el contrario, jugar con la armonía de materiales o colores.
Para determinar las dimensiones de su cortina, mida su ventana a lo largo y a lo ancho</bold>.
Generalmente aconsejamos duplicar la anchura</bold> para que la cortina pueda tener bonitas ondulaciones.
Además, no olvide incluir el margen de costura, el dobladillo</bold> y un voladizo de unos 15 cm a cada lado de su cortina si es individual.
Si estás pensando en coser un forro a tus cortinas</bold>, echa un vistazo a nuestro artículo especial sobre cortinas dobles. Allí aprenderá cómo coser cortinas dobles</link>.
Tanto si eres principiante como si no, debes saber que las patas de la cortina son un libro accesible a todos los niveles</bold>.
Sobre la base de sus cortinas, cortará rectángulos de tela</bold> del mismo tamaño: son las lengüetas. Evidentemente, determinarás las dimensiones en función del tamaño de tu cortina. A modo de ejemplo, puede colocar una lengüeta cada 15 centímetros.
A continuación, corta dos grandes tiras de tela de la misma longitud que la cortina. Estas tiras servirán para fijar las lengüetas a la cortina, una arriba y otra abajo.
Acuérdate de pespuntear bien los laterales y el dobladillo.